FESTIVAL
El oleoSÓNICA Jaén Music Fest cierra su segunda edición con un balance muy positivo ya que no sólo la promotora OSM ha demostrado que de la mano de sus socios de Inala Producciones es capaz de desarrollar un producción al nivel de las más importantes del país, sino que puede desarrollarla con la máxima eficacia y, además, con éxito de público, como demuestran las siete mil personas, aproximadamente, que ayer disfrutaron de la segunda jornada de esta edición, una página que ya queda escrita en letras doradas en la aún reciente historia del festival.
Y eso que hubo algunos condicionantes que podrían haber corrido en contra. Uno de ellos la coincidencia, en el mismo espacio, con el partido del Jaén Paraíso Interior, que gracias a la labor de los efectivos de los diversos cuerpos de seguridad desplegados y a la magnífica organización no causó interferencia (más allá de las lógicas restricciones de movilidad) en ninguno de los dos eventos. Otro de ellos fue el calor a primeras horas de la tarde, que hizo que el público decidiera retener su entrada al recinto. Eso provocó que hubiera menos público del esperado para la fabulosa banda que abrió el cartel de sábado, Viajes Espaciales Beirut. El combo jiennense tuvo la ocasión de mostrar a los más atrevidos que son una conjunción de magníficos músicos que han alcanzado una increíble precisión conjunta. Eso se manifestó en el lisérgico tour de force en el que lanzaron al público del festival. Un inicio por todo lo alto que fue rápidamente secundado por los que claramente son uno de los mejores representantes del indie rock provincial de Jaén: Blam De Lam. Los marteños pusieron de manifiesto por qué a lo largo de su carrera, en la que varias veces han estado a punto de alcanzar el circuito mayoritario, puede que le hayan faltado oportunidades, pero desde luego no buenas críticas. El grupo está en un estado de forma muy alto en este momento.
Faltaban pocos minutos para las siete de la tarde cuando tomaron el Escenario Caja Rural de Jaén los Arena Polar. Los granadinos, que se ganaron a pulso el año pasado estar en el cartel en el concurso de bandas, llegaron con su nuevo trabajo Querer o Morir recién salido del horno. Y si el disco es maravilloso, el directo es aún mejor. El grupo presentó un show tremendamente trabajado (arrancando su tema Agente Especial Asiática desde los audiovisuales con un sincronía fabulosa. Todavía queda espacio para la creatividad y la inventiva en los festivales). El potencial de la banda, ratificado en este, su primer directo de gran formato, es que simplemente no tiene techo. A continuación, un pequeño cambio de tercio de la mano de los sevillano H-Cam, rock clásico de factura impecable con la imponente voz de Nuria, su vocalista, como protagonista. El regusto a americana music es realmente sorprendente para una banda andaluza que venía como una de las más desconocidas del cartel y se convirtió en una agradable sorpresa.
A pesar del incansable trabajo del personal de control de accesos, se formaban ya las primeras colas para entrar al recinto coincidiendo con el inicio del show de Melifluo. Mucha expectación por ver a una banda que está ganando protagonismo (merecido) en el panorama nacional. Si Voces Externas ha sido una vuelta de tuerca en su sonido, los Gómez y los suyos demostraron que están ya preparados para tener protagonismo en las grandes citas y echar abajo cualquier recinto, como lo hicieron con el de Ifeja en el final de su show, un contrapunto de modernidad perfecto para introducir a una de las grandes atracciones de una noche que cayó con ellos sobre el escenario. Miles de jiennenses y algún centenar de visitantes se agolpaban ante el Escenario Cultura Jaén poco antes de las nueve cuando 091 salió entre vítores bajo los focos. Un concierto que fue un verdadero regalo para muchos espectadores, que agasajaron incluso con flores a la banda al término del mismo. Lapido dando otra muestra de maestría en la guitarra y José Antonio García demostrando que la edad sólo es un número. Pocas bandas cuentan con un repertorio tan excelso como los granadino y menos aún saben desgranarlo en directo de esta manera.
Apenas se habían apagado los aplausos para 091, que siguen manteniendo su extenso idilio con la ciudad, cuando se mostraban las maravillas del escenario twin instalado en la Zona UJA, pues en las pantallas ya se estaban disparando los primeros vídeos del preshow de Lori Meyers. Han sido muchos los conciertos de los Lori en Jaén, pero el de la noche de este sábado ha sido, sin duda, el más multitudinario. Por momentos las enormes instalaciones de Ifeja parecían haberse quedado pequeñas. Noni y los suyos comenzaron su repertorio con Hacerte Volar, premonitorio de lo que estaba a punto de suceder. No hubo nada extraordinario: una buena banda con buenas canciones, pero de repente surgió la química. Para cuando comenzó Impronta, una de las primeras canciones de su setlist, el oleoSÓNICA estaba totalmente entregado a la banda granadina. Lori Meyers pusieron fin a finales del año pasado a un larguísima gira y el de Jaén ha sido uno de los primeros conciertos con su nuevo formato, pero la conexión entre la banda no se ha resentido. Conexión que, como explicaba el propio Noni a sus allegados al término del concierto, quiso exteriorizar entre las dos energías que se daban cita en tan poco espacio, vistiendo para acabar el show una camiseta del Jaén Paraíso Interior con la que saltó a cantar Alta Fidelidad entre el público. Una de las fotos del año.
Una parte importante del público pensó que a continuación llegaría un respiro con Tu Otra Bonita, pero el grupo madrileño (posiblemente el grupo madrileño con más sabor andaluz) demostró que además de poder sonar en la radio comercial, está preparado para asaltar un escenario de un gran festival. Mucha más energía de la que cabría esperar en un primer momento y la demostración de que son una banda enormemente versátil, en el sentido más positivo del término, y que pueden llevarse lo suyo a donde quieran sin perder el sello. La noche comenzaba a refrescar y por eso el público pedía justo lo que La La Love You estaba dispuesto a ofrecerles: movimiento. El debut del cuarteto en Jaén llegó con el nuevo formato de directo, que ha dejado atrás el baile de graduación con el que conquistaron el Winzink Center hace apenas unos meses y que ahora trae un oso hinchable, pizzas y mucha interacción con el público. El grupo no para de sacar temas nuevos, todos con una calidad y una “adhesividad” absolutamente increíbles, pero el estado de gracia de la banda no se ciñe a lo compositivo, su directo es, muy posiblemente, el más divertido que se puede disfrutar ahora mismo. Ojalá la banda nunca pierda esa frescura, porque se han ganado para siempre el corazón de los oleoSÓNICOS.
El broche en cuanto a bandas la puso un clásico de los festivales que también debutaba en Jaén, los murcianos Varry Brava, que con su insuperable combinación de pop y mamarrachez pusieron a bailar a todo el público. Son muchos años girando y la banda está cargada de ases en la manga para poner al público patas arriba, no sólo con el repertorio, también con los trucos de los que tiran sin parar para llevarse a los espectadores a su terreno y hacer que sus pies se vayan al ritmo de sus canciones. Podría haber sido un magnífico colofón, pero lo cierto es que quedaba aún un capítulo por escribir, y gran parte del público decidió quedarse para vivirlo. El Djset de Juanca Supersub (en el que abundan temas de la que siempre será su banda) es de una exquisitez maravillosa, desde que “soltó a los perros” al inicio no paró mover al público al ritmo de sus platos. Eran las cuatro de la mañana cuando, ya con el frontstage abierto, una parte importante del público parecía que no estaba dispuesta a irse a casa. A ello ayudó Bita, que de nuevo volvió a cerrar la noche, en esta ocasión con más tiempo para desarrollar su talento. Confeti, fuegos artificiales y un viaje musical que nos llevó desde La Mujer de Verde hasta Esa Diva. Un broche final perfecto para una edición inolvidable.
“Lo primero que queremos decir es gracias. Gracias a Jaén, a nuestros patrocinadores, a las bandas, a los trabajadores del festival, a todo el mundo que ha hecho posible el oleoSÓNICA Jaén Music Fest 2025, por darle a nuestra tierra un evento de estas dimensiones. El balance es que Jaén ha tenido algo que no ha tenido nunca antes, que nos ha costado mucho trabajo, pero que estamos seguros que sabe que ya no puede perder. Una de las bandas que hoy ha tocado tiene una canción que se llama El Principio de Algo. Eso sentimos nosotros, que estamos ante el principio de algo. Algo bueno para la cultura y el nombre de Jaén y Andalucía”, exponía Álex Martínez, director del oleoSÓNICA Jaén Music Fest en una primera valoración.