Comienzo de las obras de la línea eléctrica Baza-Caparacena

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Beneficiará a cerca de 15.000 habitantes de Pozo Alcón, Huesa, Quesada, Hinojares y Larva. El futuro eje permitirá la evacuación de energías renovables que se generen en esa zona de Andalucía Oriental.

La subdelegada del Gobierno en Jaén, Catalina Madueño, ha calificado como “magnífica noticia para la provincia”, el comienzo de las obras de construcción de la línea eléctrica aérea a 400 kV, doble circuito, Baza-Caparacena. “Es un proyecto muy necesario para la comarca del Alto Guadalquivir, ya que redundará en el desarrollo socioeconómico de Pozo Alcón, Huesa, Quesada, Hinojares y Larva”, ha asegurado. “La creación de este eje eléctrico beneficiará a cerca de 15.000 habitantes y contribuirá a la realización de proyectos, en especial ligados a las energías renovables”, ha añadido. El proyecto está promovido por Red Eléctrica de España (REE).

Hay que recordar el actual Gobierno declaró esta línea de utilidad pública el pasado mes de mayo, “lo que supuso un impulso definitivo a esta iniciativa de futuro”, según ha explicado Catalina Madueño. A finales de este verano, el Ministerio de Política Territorial y Función Pública publicó la lista de fincas afectadas por la construcción de la denominada “autopista eléctrica”, que afectará a 866 parcelas de 19 municipios de la provincia de Granada, y a 6 parcelas de la de Jaén, en concreto en el término municipal de Pozo Alcón. Desde entonces, los técnicos de ambas Subdelegaciones comenzaron con el proceso de expropiaciones, que culminó el pasado 12 de noviembre.

El comienzo de las obras, que ejecuta Red Eléctrica de España, se ha producido después de que se completara el proceso de expropiaciones, que se ha prolongado durante mes y medio. Mientras tanto, y según explica Catalina Madueño, Red Eléctrica de España ya ha tramitado los permisos constructivos con los diferentes organismos competentes, por lo que la empresa comenzó las obras, consistentes en los primeros movimientos de tierra y cimentación de pilares.

Una vez puesta en marcha esta infraestructura, se espera que se convierta en uno de los mayores polos de energías renovables de España, capaz de generar electricidad para una población de 660.000 habitantes y crear 15.000 empleos directos e indirectos.

La nueva línea contará con un trazado de 122 kilómetros, en los que Red Eléctrica de España tiene previsto invertir unos 88 millones de euros. De ellos, 60 se destinarán al tendido eléctrico, mientras que el resto servirá para la adecuación de la subastación de Caparacena y para la construcción de una nueva subestación en Baza.

La construcción de esta “autopista eléctrica” se enmarca dentro de las necesidades marcadas por el Ministerio de Transición Ecológica, que realiza la planificación del sistema. El proyecto asume los compromisos de España con la Unión Europea para el año 2030, en el que, teóricamente, el 74 por ciento de la energía generada debe ser no contaminante. En este sentido, la línea permitirá la evacuación de las energías renovables que se generen en la zona. El plazo máximo de ejecución es de 48 meses.

Según ha expuesto la subdelegada, el nuevo eje permitiría el aprovechamiento del elevado recurso renovable existente en esta zona de la provincia, que actualmente cuenta con numerosos proyectos con un alto grado de madurez técnica y avance administrativo, y cuya ejecución depende de esta infraestructura.

Además de estos importantes proyectos económicos, el nuevo eje va a contribuir, según la subdelegada del Gobierno, a mejorar la oferta de otros servicios públicos como colegios, agua, servicios de sanidad o instalaciones deportivas, que mejorarán al contar con una infraestructura que minimicen los cortes de suministro.

Se trata, en definitiva, de una infraestructura vital para mantener la vertebración territorial y social de Andalucía Oriental y para el futuro económico y el bienestar y progreso de casi 100 municipios y de los ciudadanos que en ellos viven.